Palabras que impactan en el desempeño

Christine Porath y Christine Pearson investigan sobre el impacto de pequeños actos de mala educación. Su hipótesis inicial fue que afectan el desempeño en general.

Resultados reveladores conrmaron su hipótesis y más allá: las experiencias de trato brusco tienen consecuencias de alto impacto negativo. El 66% de los encuestados en su investigación armaron que redujeron sus esfuerzos laborales. Un 80% dijo perder tiempo preocupándose y hablando de la situación descalicadora. Un 25% desalentó clientes con sus comentarios y un 12% renunció a su trabajo.

Cuando estos datos fueron publicados, numerosas organizaciones se ocuparon de observar internamente qué sucedía al respecto. Es el caso de Cisco que estimó en US$ 12 millones al año, el costo por la incivilidad - lenguaje vulgar, irrespetuoso y falto de cultura, que utiliza formas y palabras groseras-.

Con datos tan signicativos, las investigaciones continuaron. Enfocándose esta vez en: ¿qué pasa cuándo una persona es testigo de la incivilidad? Es decir, cuando no se sufre en carne propia, sino que se ve o se escucha. Las conclusiones vuelven a ser contundentes. El desempeño de los testigos, emporó en forma signicativa, con una caída del 25% en su performance laboral y un 45% menos de nuevas ideas.

Los expertos concluyen que la incivilidad es un virus demasiado contagioso, que va más allá del mundo organizacional. Está en los hogares, las instituciones educativas y la sociedad. Afecta las emociones, las relaciones, la atención, el desempeño, la motivación y más aún, la capacidad mental.

¡Se expande tanto en quienes la viven como quienes la presencian y todos son portadores. Es un circulo vicioso que se potencia!

La afectación se produce con solo ver o escuchar palabras groseras. Una nueva investigación, llevada a cabo con dos grupos, ofreció nuevos datos. Uno recibió palabras que sugerían grosería y el otro, recibía palabras sin groserías, ambos debían construir oraciones con ellas. Quienes pertenecían al grupo de las palabras groseras, fueron 5 veces más propensos a perder información, les costó tomar decisiones y cometían muchos más errores.

Avanzando sobre lo descubierto, la siguiente pregunta que guía nuevas investigaciones es: si la incivilidad tiene tanta fama negativa, ¿porque continua? Y la principal causa es el estrés. La siguiente causa es que existen personas que relacionan amabilidad con imbecilidad. Parecen creer que gente amable se queda atrás. Personas de la historia evidencian que este comportamiento en ocasiones es exitoso, pero lo es por un plazo determinado. Llega un momento donde la persona que prodiga la incivilidad, cae. La excepción la generan los que se transforman a tiempo.

Morgan Mc Call y Michael Lombardo, llevan a cabo una investigación en el Centro de Liderazgo Creativo. Encuentran que la principal razón de fracaso en las empresas, es tener un trato insensible, brusco y acosador.

Ser amable duplica la posibilidad de ser vistos como líderes y aumenta signicativamente el propio desempeño. Se puede ser amable y discrepar, aún tener opiniones fuertes y discusiones siendo respetuoso. Las personas que se sienten respetadas son 56% más sanas, tienen 92% más atención y foco, están 55% más comprometidos y son más propensos a permanecer en la organización.

¿Qué hacer para ser amable? Es cuestión del día a día. Pequeñas acciones como dar las gracias, prestar atención cuando hablas con alguien, considerar los intereses del otro, respetar en la forma de hablar, compartir el éxito, reconocer y sonreír.